La trufa es un tipo de hongo que se caracteriza por su aroma agradable y su buen sabor. Su clasificación indica que pertenecen al género Tuber, la familia Tuberaceae y la división de los ascomicetos. Las trufas tienen un aspecto algo redondeado aunque más bien irregular.
La trufa es un hongo rico en minerales y vitaminas, que cuenta con niveles muy bajos en hidratos de carbono y grasas. Además, aporta fibra y proteínas vegetales. Podemos destacar el alto contenido en vitamina C y vitaminas del grupo B (con mayor cantidad en B2, B3 y B9). En conjunto, mejoran la salud de la vista y favorecen la actividad cardiaca. También nos aporta fibra y proteínas vegetales.
No hay ninguna trufa igual a esta. Existen 70 especies diferentes, 32 de las cuales se pueden encontrar en Europa, aunque la más buscada y apreciada es la Trufa Negra.
Sin duda las características de nuestra provincia hacen que la Trufa Negra de Teruel sea de una calidad excepcional. Los factores que favorecen el desarrollo de la trufa son:
El suelo: suelos calizos y pobres, con pedregosidad importante.
El clima: de veranos cortos y frescos, con habituales nevadas en invierno y fuerte ventosidad. El clima está condicionado en gran medida por la altitud de la zona, el relieve y la por la relativa proximidad al mar Mediterráneo que podemos definir como mediterráneo de montaña.
